domingo, 7 de septiembre de 2008

Cuento Corto II

En medio de tal confusión y después de la media hora que les tomo a estos extraterrestres aprender mi idioma, yo seguía incrédulo. Gracias a mi ayuda y a la de un pesado diccionario, los peregrinos consiguieron con asombrosa velocidad formar sus extrañas voces de una manera que era perfectamente comprensible para mí.

Dejé que hablaran ellos primero, se me perdían las palabras.

-Sabemos que tienes muchas preguntas… Trataremos de contestar algunas. Primero, te diré que tenemos un alto sentido de la curiosidad, es fascinante haberte encontrado.-

Me explicaron de donde venían, que al igual que nosotros, estaban basados en carbono. Continuó hablando sobre el desarrollo de su especie.

-Gracias a tu concepto de “evolución”, marginalmente correcto, podrás entender algunas cosas más de nuestra raza. Nosotros no somos los seres más evolucionados de nuestro planeta, pero gracias a una distinta dinámica genética, que nos permite alcanzar un punto de saturación muy elevado para el desarrollo de la complejidad cerebral, somos la especie con mayor inteligencia no-colectiva. -

Hicieron un largo recuento sobre la competitividad inter-especie de su planeta, después de un instante y lo que juzgué como unas sonrisas, me hicieron una pregunta muy extraña. Me preguntaron si el concepto de nombre aplicaba para todo, incluso nosotros. Les dije que si, que yo tenía nombre. Esto pareció interesarles mucho e intercambiaron algunos gestos inescrutables durante algunos segundos.

De pronto caí en cuenta de la importancia de este encuentro y aprovechando el momentáneo silencio me lancé lo mejor que pude a cuestiones fundamentales.

-¿Ustedes se han preguntado acerca del universo?

 ¿Han logrado resolver el acertijo? ¿Por qué existe la materia, de donde viene el universo, porque estamos vivos, que es la conciencia?-

Esperaron inmóviles un momento después de mi ataque, parecían pensar. Por primera vez me fijé en sus ojos y me sentí horrorizado, ojos inefables, el recuerdo de su aspecto aún me visita en noches sin calma. Ellos percibieron mi profundo miedo y en un gesto de comprensión decidieron cerrarlos por el resto del encuentro y continuar su meditación.

Finalmente dijeron

– Hace mucho tiempo encontramos la respuesta a tu pregunta y hasta el día de hoy seguimos trabajando en sus distintas manifestaciones. Hemos debatido la cuestión, y lamentablemente hemos concluido que es imposible explicarla en tu forma de lenguaje.-

Rápidamente expliqué que podía entender otros lenguajes.  Hablé de la lógica, de la geometría, de los sistemas lineales. Pero pronto me interrumpieron.

-Sabemos de todo esto gracias al diccionario y ese no es el problema. El problema es que la respuesta a tu pregunta no puede ser explicada en un lenguaje simbólico. Sin embargo, existe una manifestación visual de esa respuesta y podemos mostrártela.-

Uno de ellos dibujó con su dedo una figura sobre el suelo terregoso y luego emitió consecutivamente una serie de luces verdes y rojas  sobre la figura.

-Esa es la respuesta-

-¿Esa es la respuesta?-

-Al parecer tu inteligencia se basa en relación de asociaciones a conceptos y en reconocimiento de patrones, no tenemos como explicarte.-

Puse toda mi atención en la figura y las luces, me concentré en todas las partes y su relación con el todo, todas las posibles referencias y no encontré nada.   Les dije que necesitaba tiempo para pensarlo. Comprendieron.

1 comentario:

Anónimo dijo...

buena pape! atas al lector y no lo sueltas!
kike