lunes, 3 de septiembre de 2007

Huge Withdrawal from the First Lies Bank

Conflictos morales.
La vida se construye a través de los filtros de la moral personal.
Cualquier tipo de comportamiento o pensamiento que entre en conflicto con nuestras propias barreras morales es automáticamente rechazado por nuestro juicio.
Así es, ni modo.
Incontables filósofos se han dedicado a deshebrar los nudos de esta característica de nuestro andar. La respuesta es siempre la misma aunque con caminos distintos; el bien y el mal son intrínsecos al hombre, es parte de lo que ha hecho que su inteligencia crezca a lo largo del tiempo porque puedes sopesar casi cada una de las elecciones de la vida con esa pregunta.
Es el alma de la elección.
Paradójicamente el libre albedrío se pelea su nombre con aquello que le da vida consciente.
Y con muchos otros aspectos de la vida obviamente, aquello que la hace difícil e interesante de vivir.
No lean más.
Vean el siguiente video por 1 o 2 minutos.
Luego párenlo y sigan leyendo un poco hasta que lo quieran volver a poner.
Be honest with yourselves.




El experimento del Dr. Milgram se ideó para medir la respuesta de individuos sujetos a las órdenes de una figura de autoridad que los instruía a realizar actos que entraban en conflicto con sus creencias morales.
El experimento se realiza de la siguiente manera.
El sujeto que uds. pueden ver en el video haciendo las preguntas y administrando los castigos, "El Maestro", es el sujeto del experimento.
El cree que del otro lada de la pared hay una persona conectada a unos electrodos encargados de suministrar la descarga. Esta persona tiene acceso a un tablero de respuestas. Cada vez que el alumno falla se les da una descarga de cierto voltaje que aumenta de acuerdo con el número del fallas. En realidad no hay otra persona del otro lado de la pared. Se trata de un actor.
El sujeto que somete a su autoridad al participante le insiste en que continúe con el ejercicio sin importar lo que le oiga.
Un buen círculo.
El experimento tiene resultados muy interesantes.
Como siempre.

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